Recuerdo un vuelo Lima-Cuzco que compartí en un periplo por Perú con Brianda y unos amigos, en que íbamos sentados juntos✈️ y yo hacía cuentos de la lechera: Brianda, haz papel pintado, un perfume propio e ilustra el mundo porque tienes en tu ser un mundo propio e ilustrado en sí mismo…
Hoy ese mundo que cada día está más auto explorado y es más único, da un paso de gigante al entrar en un club lleno de grandes artistas ⏳⌛️que como Brianda Fitz-James lo llevan a Swatch para crear juntos una esfera con correa que coleccionar.
Por eso, he querido hablar con ella y enterarme de qué va esta colaboración tan digna de celebrar:
Josie.- ¿Cómo se planteó esta colaboración? ¿Cómo empezó todo?
Brianda.- Hace dos años Swatch me invitó a la Bienal de Venecia, fue un viaje alucinante y tuve la suerte de poder conocer a Carlo, el director creativo de Swatch. Le enseñé mi portafolio y me propuso hacer un diseño para el nuevo POP Swatch que lanzaban este año. La verdad es que es un gusto trabajar con ellos, la libertad que te dejan a la hora de crear y la confianza que depositan en el artista es algo que se agradece enormemente.
J.- ¿Conocías la marca?, ¿Hay algún modelo al que tengas cariño?
B.- ¡Quién no conoce SWATCH! De niña el reloj que llevaba era de Swatch, he tenido varios modelos y mi favorito era uno que tenía los minutos en una rosca que giraba. Me entusiasmaba.
J.- ¿Cómo es el tuyo? Cuéntanos de qué se trata.
B.- Mi reloj está inspirado en un libro de la literatura francesa medieval, Melusina, que siempre me fascinó. Hija del rey Elinas de Escocia y del hada Persina, fue maldecida por su madre condenándola a ser mitad mujer, mitad serpiente, por encerrar a su padre en la montaña mágica de Northumberland.
Un día en el bosque, un noble conde se enamora de ella y la bella Melusina accede a casarse con él con la condición de que todos los sábados le permita retirarse a sus aposentos, sin ser vista ni de día ni de noche. El conde accede, aunque no consigue cumplir su promesa porque un día, lleno de curiosidad, no resistió a mirar por la cerradura de la puerta. Ella estaba en el baño, y de cintura para abajo… ¡era una serpiente!
Con este diseño he querido traer la magia de esta maravillosa historia a un reloj que se transforma tal y como le ocurre a nuestra protagonista, Melusina.
J.- Del Swatch de Kiki Picasso en 1984, pasando por Pedro Almodóvar, Agatha Ruiz de la Prada, Jean-Charles de Castelbajac, David LaChapelle o Jeremy Scott y hasta llegar hoy a tu reloj. ¿ Qué supone esta insigne colaboración como artista? ¿Qué te gustaría hacer a partir de ahora y lo más importante: ¿cómo te gustaría administrar tu tiempo o tu carrera partiendo de la esfera de tu Swatch?
B.- Imagínate la felicidad que experimenté cuando me propusieron la colaboración, que a Swatch le guste mi trabajo es una grandísima alegría y me motiva mucho para el futuro. Estoy muy ilusionada y muy feliz con el resultado.
Seguiré centrada en mi trabajo creativo que es lo que más disfruto. ¡La próxima semana por fin estreno web!
J.- ¿Qué tal te ha sentado la primavera? ¿Qué te apetece ponerte? En qué punto estás.
B.- La primavera es la época del año que más me gusta, empieza el buen tiempo con el contraste de las tormentas que me encantan, es la explosión de la naturaleza, nada me pone de mejor humor… será porque nací en primavera?
J.- Y como amante de la música y la pista de baile qué tema no puede faltar esta noche y esta primavera en general?
B.- La canción mítica de Disco Let´s All Chant de Michael Zager Band, siempre me hace bailar como una loca.
J.- ¿Has visto ya en El Prado los tesoros de la Hispanic Society? ¿Qué exposiciones tienes en mente visitar este año?
B.- Todavía no he podido verla! Tengo muchas ganas de ir, vi la exposición de Clara Peeters que aunque era breve la disfruté muchísimo, además de poder ver por fin pinturas clásicas de una mujer.
Tengo en mente ir a todas las exposiciones que pueda! Ja,ja,ja.. Tampoco he ido a ver la exposición de obras maestra de Budapest desde el renacimiento hasta las vanguardias del Thyssen. Hay tanto que ver en Madrid!
J.- Dime una razón que te resulte digna de detener el tiempo y parar este reloj.
B.- Curiosamente es un sueño recurrente que tengo, tener la habilidad de parar el tiempo o viajar en él, sería maravilloso! Estaría parándolo constantemente, hay tantos buenos momentos…
Estar en contacto con la naturaleza sin máquinas es una manera no de pararlo pero por lo menos de ralentizarlo.
Fotografías: Inés Ybarra
