El invierno que viene Kim Jones propone y Vuitton dispone que nos entreguemos al Clayton, la tela estampada por Titley and Marr que Vreeland consagró como quintasencia de lo molón en su casa de Nueva York y que en 2013 pintarrajean los traviesos hermanos Chapman en seda y loneta para bolsos de viaje. Empápate de esta ecuación:

 [(Titley and Marr + Clayton) + Diana Vreeland] + (Kim Jones + Chapman hnos.) = Louis Vuitton A/W 013 MEN 

 

“The Eye has to Travel”, el documental que recorre la vida y obra de Vreeland, ha removido mucha estética buena -la que envuelve su figura-, y ha despertado ese microcosmos tan propio, marciano y privado que la directora de Vogue construyó a su alrededor. AD USA publicaba justo antes de la salida de la película unas páginas de su número de septiembre de 1975 que visitaban las estancias privadas que decoró para ella su viejo amigo Billy Baldwin. Dentro de esta casa destaca una sala que ella llamó “The garden in hell” (Un jardín en el infierno) y cuyo horror vacui en flores y rojo escarlata lo protagoniza un algodón estampado llamado CLAYTON de la casa inglesa de telas “Titley and Marr”.

 

 

Parece que uno de los reportajes que revisitan la figura de esta superdotada de la moda o el propio documental “The Eye has to Travel” han inspirado Kim Jones y a los Chapman para usar como base de pintarrajeo esta tela que tanto significa ya en el imaginario colectivo de la moda internacional ¿Quién a día de hoy no ha visto la imagen de Diana Vreeland en su  sofá tapizado en seda dentro de ese infierno rojo y floral? Si a esta base añadimos globos oculares a punto de estallar y esos mostruitos que recuerdan a los que ya pintaron sobre grabados originales de Goya, tenemos un print escarlotasamentescandaloso para el Vuitton hombre de la nueva era. Kim Jones, de Umbro a Vuitton, siempre dándolo todo.