Costura sin reloj

Fotografía Phillipe Milton

Fotografía Phillipe Milton

 

Conocí a Armiche y Javier en su antiguo estudio de la calle Alvarez Quintero. Vicente Gallart quería a toda costa presentarme a este dúo y acudí con él una de las tardes de aquel verano 2010, en el que yo estaba agotado tras acabar la grabación de “El Armario de Josie”.

 

“Cosen muy bien, saben mucho de patronaje; se nota en cada prenda…” me decía Vicente. Entré en una de las habitaciones que hacían de showroom y en aquella tercera oleada Mad Men se me hacían más que apetecibles aquellos escotes barco, faldas de vuelo y botones de pastilla. Me recordaba al Fall de Vuitton 2010 pero con un punto visionario, ya que NIHIL OBSTAT lo habían confeccionado meses antes de que Marc Jacobs lo presentara. Calendarios de moda aparte, la que habían esbozado para invierno tenía mucho de este clasicismo fifties, de costura, de prendas bien hechas, de esplendor High Style y sus trajes de novia compartían ese espíritu que era seña de la casa.

 

Han pasado los años y los NIHIL OBSTAT han crecido, han comenzado a desfilar en el OFF de MBFWM. Tiene una clientela fiel que pide vestidos atemporales y para atenderla se han mudado a una calle perpendicular a la anterior, Serrano Anguita. Toco el timbre del número 18 para escoger un par de piezas de este otoño que fotografiar con Phillipe Milton y de paso me contestan unas preguntas:

 

Josie´s Journal.- ¿Cómo empieza Nihil Obstat?

Nihil Obstat.- Empezó hace casi ocho años y en principio no pensábamos en hacer una marca de prêt-à-porter, sino dedicarnos a la costura (novias, trajes a medida, etc.). Pero empezamos a hacer capsulas y colecciones pequeñas que desembocaron en la creación de esta marca.

 

JJ.- Pero cuéntame vuestros antecedentes y vuestros trabajos previos que os han hecho recopilar tanta información de moda y patronaje como manejáis actualmente…

N.O.- Javi llevaba diez años en el equipo de Sybilla cuando nos conocimos en 2006 y planteamos este proyecto porque nuestra concepción de la moda era muy parecida (colecciones pequeñas, muy cuidadas, compuestas por piezas atemporales de fondo de armario y que sentaran bien…), pero antes trabajamos mucho la costura a medida para sufragar gastos y colaboramos como consultores patronistas de diseñadores como Trías, Sybilla y Jocomomola, Carmen March, Jesús del Pozo o Jorge Acuña.

 

JJ.- ¿Y esa colaboración de consultoría en qué consiste?

N.O.- Es dar un apoyo técnico, resolver la pieza tal y como quieren que sea: corte, volumen, patronaje y resolver toda la parte del taller con tejidos, acabados y confección.

 

JJ.- ¿Y cómo se aprende todo esto? ¿Quién os enseñó?

Javi.- Yo estudié en el Centro Superior de Diseño y cursé estudios de diseño de moda centrándome en Alta Costura pero justo en la época en que yo estudié tuve la suerte de coincidir en el Centro con las hermanas Carriches, que habían trabajado para Cristobal Balenciaga en EISA, su taller de Madrid. Cosieron los encargos más importantes del modisto más importante, como los vestidos de novia de Fabiola de Bélgica o el de Carmen Martinez Bordiú. Ellas me enseñaron lo mejor de las técnicas de costura, su dominio de la técnica y su capacidad resolutiva óptima fueron las mejores lecciones de todos los años que pasé en esta escuela. Aprendí tanto, que finalizados los estudios fui a cursos de especialización con ellas porque además se me daba muy bien y veía que tenía cierta destreza.

Armiche.- A mi me viene de familia porque crecí con esto ya que mi bisabuelo tenía una sastrería. Mi abuelo y mi madre me enseñaron el oficio, pero me faltaba mucha técnica y en estos años he aprendido mucho.

 

JJ.- Decís que buscáis vestidos atemporales. ¿Qué significa eso? ¿Qué es un vestido atemporal?

N.O.- Se trata de elegir bien: que esté enfocado a las necesidades de esa persona, de los colores y tejidos que le favorecen y sobre todo huir de la tendencia porque lo que es tendencia hoy, en cuestión de dos temporadas está obsoleto. También ayuda mucho el punto vintagista de las siluetas clásicas, el no saber de dónde lo has sacado, reconocer en él ciertos aires de una época pero sin saber a ciencia cierta de qué época es…

 

JJ.- ¿Qué habéis hecho para este otoño/invierno?

N.O.- La colección se llama “Números complejos” y queríamos recuperar siluetas de los 90´s, aligerar, hacer geometrías a nuestra manera.

 

JJ.- ¿Y dónde vais a venderla?

N.O.- Aquí en el taller, por supuesto; en un portal de venta online que se llama lamasmona.com y en tiendas como YOWE en León o Santander y Puro Garbo en Sevilla.

 

JJ.- ¿De todos los encargos que os han hecho, con cuál os quedáis?

N.O.- El vestuario de Julianne Moore para “Savage Grace”. Fueron siete vestidos, probarla a ella… Es increíble y fue una experiencia increíble.

 

JJ.- Y en cuanto a novias, uno de vuestros fuertes, ¿Qué tienen de especial vuestros trajes?

N.O.- Son de un minimalismo muy sofisticado, sobriedad y sencillez muy estudiada técnicamente para que la novia resalte por encima de ese vestido. Ella ha de quedar en primer plano, sobre un tejido excelente y una costura de primer nivel que la acompañe sin disfrazarla. Las novias vienen con sus HOLA´s y sus ideas y nos dan pistas para trabajar y sobre eso vamos viendo un diseño que pueda favorecerla, estudiar su cuerpo y probar…

 

JJ.- ¿Con qué diseñador os quedáis?

N.O.- Seguramente nos quedaríamos con un americano, porque hacen ropa para que se consuma y lo hacen muy bien. Nos encanta Marc Jacobs por su bagaje, por la cantidad de escenas que ha vivido y cómo han influido en su obra. Pero también nos gusta Proenza y admiramos la ejecución y el minimalismo innovador tan depurado de Francisco Costa en Calvin Klein.

 

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JJ.- ¿Un histórico además de Balenciaga?

N.O.- Jacques Fath por su carrera meteórica y sus pinitos Prêt-à-porter. También nos inspira ClaireMcCardell y su ropa deportiva.

 

JJ.- ¿Os gustaría vestir a Letizia?

N.O.- Pues la verdad, no sabemos muy bien porque no nos gusta mucho como va… Le mandamos un vestido una vez a La Zarzuela pero nos lo devolvieron porque le estaba pequeño y quedaron en llamarnos para el arreglo, pero nunca más llamaron.

 

JJ.- ¿Un lugar de Madrid? 

N.O.- El Real Jardín Botánico en sus diferentes cambios de estación.

 

JJ.- Con razón os llamo yo lo Christiandiores (risas) y es que compartís con él también el gusto por las flores aunque era más de dibujar que de coser… 

N.O.- Pues sí, nos encantan y siempre llevo en el móvil (Javi) un álbum con fotos de flores que encuentro.

 

JJ.- ¿Con cuál os quedáis?

N.O.- La protea (Armiche) y los tulipanes (Javi)